Diccionario Ibérico
Añada: Año natural en el que se ha beneficiado el animal. En el caso de los cerdos de bellota ibéricos, coincide con el fin de la montanera, durante los meses de febrero y marzo.
Arroba: Medida utilizada para pesar a los cerdos. Equivale a 11,5 Kg.
Babilla: Parte del Jamón Ibérico delimitada por los huesos fémur y coxal. Siendo la parte más curada y estrecha, tiene un sabor muy armonioso y persistente. Su aspecto es de color rojizo intenso con apenas unas vetas de color ladrillo.
Bellota: Fruto de las especies del género Quercus (encinas y robles, entre otros). Es el principal alimento de los cerdos ibéricos en montanera.
Cadera: Parte situada en la punta del jamón, opuesta a la pezuña y separada de la maza y la babilla por el hueso de la cadera. Su sabor es largo y suave, tiene un ligero picor en garganta por la edad de la carne y su larga curación. Su aspecto es de color rojo pálido y con unas vetas de grasa de mayor tamaño que en la maza.
Chorrera: También llamada “recoge grasas”. Es un vaso contenedor, que se coloca en la punta del jamón cuando está colgado y que recoge la grasa que se desprende del sudado del mismo.
Cuchillo Jamonero: Es un cuchillo especial para cortar jamón que dispone de una hoja estrecha y flexible, de gran longitud.
Curación: Acción y efecto de curar o curarse. El jamón es sometido a un proceso de curación a base de sal y tiempo. En el caso de los jamones ibéricos de Carrasco, el tiempo mínimo de curación es de 36- 48 meses.
Dehesa: Ecosistema característico del suroeste de la Península Ibérica, en la cual coexisten encinas, alcornoques y pastizales. Es el hábitat natural del cerdo ibérico.
Encina: Árbol de la familia de las fagáceas, con tronco grueso, ramificado en varios brazos. Tiene por fruto bellotas y madera muy dura y compacta.
Extremadura: Es la mayor dehesa del mundo. Su orografía, clima, flora y fauna hacen que sea el lugar perfecto para la cría del cochino ibérico.
Guijuelo: Es un municipio de Salamanca mundialmente conocido por sus jamones. Su localización y clima hacen que sea el lugar perfecto para la curación del jamón.
Jamón: Pata traseras del cerdo ibérico, de entre 7 y 12 kg. Tradicionalmente considerado como la parte más noble del cerdo, es uno de los emblemas únicos de la gastronomía española.
Jarrete: Área pegada a la pezuña, por donde se empieza a limpiar el jamón, recortando la piel a su alrededor para poder retirar la corteza. Es una parte fibrosa, llena de tendones, pero por otra parte la más jugosa y sabrosa.
Maza: Es la parte más ancha del jamón y con mayor cantidad de carne. Sabrosa, tierna, jugosa, de sabor dulce, con algunas notas de sal y retrogusto largo; es suave y untuosa en el paladar. El jamón nos va a durar pocos días si comienza a cortarlo por la maza.
Montanera: Periodo que transcurre entre los meses de octubre y marzo y que coincide con la época de bellota, donde se produce el engorde de manera natural de los cerdos ibéricos en la dehesa.
Oleico: El ácido oleico es un tipo de grasa líquida e incolora que aporta a la bellota esa composición grasa que beneficia la alimentación del cochino.
Paleta: Patas delanteras del cerdo ibérico. De menor peso que los jamones y pesan entre los 4 y 6 kg. Es muy sabrosa gracias a la presencia de grasa y requiere menos tiempo de curación que los jamones.
Salazón: Es el proceso al que se someten los jamones y las paletas, cubriéndolas con sal de origen marino para que esta penetre paulatinamente en su interior. Este proceso dura aproximadamente, un día por cada kilo de la pieza.
Secadero: Lugar cerrado donde se conservan y maduran los jamones y las paletas ibéricas, manteniendo una temperatura y humedad constantes.